Lo que el río ve

Vienen curvas

UNAI OIARTZUN

La segunda vuelta del campeonato va a deparar varios partidos con similares características a las de Guadalajara. Serán encuentros vibrantes, con mucho en juego, pero en los que será difícil ver lo mejor de cada contendiente. Los equipos ya están muy trabajados, se conocen entre ellos, y buscan la manera de obstaculizar el juego rival. Imponerse en duelos tan competidos será complicado para el Real Unión. Por eso del empate en el Pedro Escartín no puede hacerse una lectura negativa. Los txuribeltz se llevaron un punto de casa del cuarto clasificado, y lo hicieron manteniendo la portería a cero. El Unión ya no es la intratable apisonadora que fue en diciembre, pero sigue sumando y alargando la racha de partidos sin perder. Pasan las jornadas y el equipo continúa en el grupo cabecero. Poco a poco empieza a aparecer una brecha en mitad de la tabla, y los txuribeltz se encuentran muy por encima de ella. A día de hoy, el Barakaldo parece el último equipo con opciones de luchar por el play-off. Salvo sorpresa, el resto de equipos deberán conformarse con otros objetivos.

En cuanto al partido de Guadalajara, la línea defensiva fue la mejor del equipo. Esnaola y Aimar Sagastibeltza se han afianzado en el centro de la zaga, y llevan semanas rindiendo a un excelente nivel. Morcillo ya no es niguna sorpresa, pero no olvidemos que la temporada pasada jugaba en División de Honor Regional. Ha progresado de manera evidente, y se ha convertido en un latera de total garantía para la Segunda B. En esta ocasión faltaba el polivalente Urkizu, uno de los jugadores más destacados en lo que va de temporada. Pero Ibarbia cumplió con creces, dando un paso al frente y poniendo en valor la amplitud de la plantilla del Real Unión. Ante cualquier problema apareció Tena, tan atento y seguro como siempre. El resto del equipo empezó muy activo, pero se fue desinflando poco a poco. Alcarreños superaron a irundarras en el centro del campo, y consecuencia de ello fueron los cambios que realizó Aitor Zulaika bastante antes de lo habitual. Eneko Romo e Iriondo trataron de cambiar el rumbo del partido. De todas formas, el Guadalajara estuvo más cerca de sumar los tres puntos.

La siguiente jornada trae, precisamente, otro de esos partidos de altos vuelos ante rivales directos. El Toledo mantiene viva su esperanza de entrar en la fase de ascenso. No obstante, tiene cuatro puntos de desventaja con respecto al Real Unión. En caso de ganar el encuentro, los unionistas dejarían al rival a siete puntos de distancia. A estas alturas, una renta considerable. No es el único ni el más inmediato objetivo de los txuribeltz durante esta primera semana de febrero. Los de Zulaika viajan a Mallorca para disputar la ida de los cuartos de final de la Copa Federación. Será interesante ver cómo plantea la eliminatoria el entrenador de Azpeitia. Apostar por los descartes, por jugadores recién recuperados y por jóvenes valores del filial le ha dado resultado hasta el momento. Pero la final se ve cada vez más cerca, y esa posibilidad podría ser una razón para variar ligeramente los planes. Sin embargo, la visita del Toledo mantiene intacto el nivel de exigencia en liga, y no es fácil gestionar la situación. En cualquier caso, la verdad es que la Copa Federación comienza a ilusionar a partir de cuartos de final.