lunes, 10 de junio de 2013

Arranca la campaña de ampliación de capital

Fuente: "realunionclub.com"
El Real Unión ha presentado esta mediodía en el Stadium Gal los detalles del proceso de ampliación del capital social de la entidad. La ampliación será de 750.000 euros según se aprobó en la junta general de accionistas celebrada el pasado 31 de mayo. La campaña de ampliación de capital se iniciará el próximo lunes día 8 de junio. Desde ese día y hasta el 10 de julio, los actuales accionistas serán los únicos que podrán adquirir acciones del club. 
La segunda fase tendrá lugar entre el 15 y el 31 de julio. Esta etapa estará destinada a la compensación de créditos con acreedores.
Por último, la tercera fase se desarrollará entre el 1 de agosto y el 30 de octubre. En ella todos los interesados, actuales accionistas o no, podrán adquirir acciones del Real Unión.
Los interesados pueden dirigirse al número de telefono 943 62 01 03 donde se les facilitará información más detallada acerca del proceso. También la próxima semana se iniciará una amplia campaña publicitaria y se incluirá un apartado informativo en la web oficial del club.
Rueda de prensa íntegra en "txingudionline.com": http://www.txingudionline.com/deporte/rueda-de-prensa-integra-de-ricardo-garcia-sobre-la-ampliacion-de-capital-del-real-union.html

sábado, 1 de junio de 2013

El Real Unión lanza un S.O.S.

Artículo: "Mundo Deportivo"
El Real Unión hizo ayer público lo que la rumorología venía vaticinando de un tiempo a esta parte. El club tiene una deuda enorme que amenaza seriamente su futuro, hasta el punto de que el Concurso de Acreedores podría ser una realidad no muy lejana. Aunque en la asamblea de ayer no se dio una cifra oficial de a cuánto asciende la deuda del club, lo cierto es que el ex presidente José Antonio Zabala, que tenía en su poder la documentación que había pedido al club, habló de 2.600.000 euros y esa cifra no fue desmentida. No obstante, lo más urgente es conseguir antes del 30 de junio cerca de 300.000 euros con los que hacer frente a las mensualidades pendientes a la plantilla para evitar el descenso a Tercera División. Y ni ahora mismo parece sencillo porque las entidades bancarias no terminan de conceder los créditos solicitados pese a disponer de garantías. Por eso, para hacer frente a la deuda a corto plazo, el Consejo de Administración solicitó a la Junta General de Accionistas la aprobación de una polémica ampliación de capital de 750.000 euros. Tanto ese punto del orden del día como los restantes salieron adelante básicamente porque el Consejo de Administración tenía en su poder las acciones necesarias para lograrlo, porque los accionistas presentes ayer en el Centro Cultural Amaya mostraron mayoritariamente su rechazo a la gestión de Ricardo García y su grupo.
Fue una asamblea tensa, con cruces de acusaciones y que se extendió hasta casi las tres horas de duración. Muy distinta sin duda a las balsas de aceite de años anteriores. Los reproches comenzaron muy pronto. Ricardo García pasó a realizar el Informe del Presidente y comenzó pidiendo disculpas por las fechas de celebración de una Junta que debía de haberse llevado a cabo varios meses antes, y acto seguido explicó, según él, el origen de los problemas que fechó en la temporada 10/11. Habló de las reducciones en las subvenciones que reciben de las instituciones, y de la falta de liquidez de Zuhaizti, el patrocinador principal, elevando a 390.000 euros el dinero que habían dejado de percibir. Todo ello provocó unas tensiones en la tesorería que ya la temporada pasada comenzaron a generar los primeros problemas de cobro entre la plantilla y los empleados del club. Para solucionarlo, se habló con varias entidades bancarias pero, salvo Kutxa, ninguna de ellas dio una respuesta positiva. “Es una situación difícil”, afirmó Ricardo García. “Hemos sufrido muchísimo. Es duro llegar al club, saber que no puedes pagar y ver las caras de la gente. Es muy duro”, reiteró. Los problemas han ido creciendo durante esta temporada hasta el punto de que a menos de un mes para finalizar la temporada el club adeuda cerca de 300.000 euros a la plantilla, que debe de abonar antes del 30 de junio. Pero no va a ser fácil. El club se ha reunido con Kutxa y Banco Sabadell de los que espera una respuesta en los próximos días, poniendo como aval los 290.000 euros que percibirá el Real Unión los dos próximos años del convenio que tiene suscrito con la Real. Pero ni así parece seguro que pueda recibir ese crédito. El club también maneja otras fórmulas, una de las cuales, según confirmó Ricardo García, es que la Real le adelante ese dinero, algo que ya han hablado con la entidad txuriurdin, si bien “trataremos de buscar la solución entre nosotros”. 

Déficit de 656.900 euros

Respecto a las cuentas de la temporada 2011/12, el club presentó unos ingresos de 1.622.500 euros y unos gastos de 2.279.400 euros, que generaron un déficit de 656.900 euros, de los cuales 320.000 se deberían a los ingresos previstos que no llegaron por la reducción de las subvenciones y la falta de liquidez del patrocinador principal. La Junta General fue 'kafkiana' en algunos momentos, como cuando se tuvo que aprobar el presupuesto de la campaña 2012/13 que ya se ha gastado. El mismo ascendió a 1.505.000 euros, pero se gastó 1.567.100 euros, generando un déficit de 62.100 euros a los que habría que sumar los 280.000 euros que se le deben a la plantilla. Los problemas del Real Unión no terminan ahí porque debido a esta deriva que lleva la entidad,se han hipotecado ingresos de los próximos años. Además del convenio con la Real para los próximos dos años, el Real Unión ha utilizado el convenio con el Ayuntamiento de Irun para el derecho de uso y explotación del Stadium Gal para mortizar un crédito de 1.083.000, a 15 años, que tiene con Kutxa para financiar la deuda, lo que provocará que en los próximos cuatro años el presupuesto sea de 1.198.642 euros por temporada -un 51% menos que en la 10/11-, sin contar la Copa o el playoff, con vistas a generar un superávit de 80.552 euros por año que servirían para amortizar los 300.000 euros de crédito que se pretenden conseguir. Todo esto está enmarcado en un plan de viabilidad que contempla, además de esta bajada de presupuesto, una reorganización interna del club para ajustar costes y la prórroga de los convenios vigentes.

Petición de los ex presidentes

Toda esta situación ha provocado que tres ex presidentes del club -se identificaron José Antonio Zabala y Carlos Fernández de Casadevante-, además de otras personas con una representación importante de acciones, se hayan reunido en los últimos días para intentar poner freno a esta situación. Por ello, el propio Zabala exigió a Ricardo García que aceptase una serie de condiciones para seguir adelante (cuentas auditadas por un agente externo, préstamos futuros avalados por el Consejo...) que de no ser aceptados llevarían a una convocatoria de una Junta Extraordinaria. Para sorpresa de los asistentes, Zabala, en representación de este grupo, se mostró incluso dispuesto a colaborar económicamente con el club “incluso afondo perdido”. El presidente del Real Unión se mostró partidario de volver a convocar una Junta si fuera necesario e invitó a este grupo a sumarse al Consejo. Fue el final de una Junta General que traerá cola y que desnudó las vergüenzas de un club que está cerca de cumplir cien años.

Fuente: "Mundo Deportivo"