Lo que el río ve

Largo camino

UNAI OIARTZUN

Habrá que sufrir para sumar cuarenta y cinco. No va a resultar nada fácil. El riesgo y la delicada tesitura pesan mucho al Real Unión. Por eso cada punto tiene y tendrá su valor. El domingo los de Sergio Francisco salieron airosos de Getafe. Sumaron en casa de un rival directo. Lo dejaron a la misma distancia y de paso ampliaron la renta sobre los puestos de descenso. Lo único indispensable era no caer derrotado, y el equipo cumplió con lo mínimo. Entendió que otro tropiezo hubiera resultado muy preocupante, y se centró en no dar facilidades al rival. Demostró la seriedad y el compromiso necesarios para resolver el enredo en el que se encuentra inmerso.

            El Real Unión estuvo correcto en el trabajo defensivo. Orden, colocación y contundencia evitaron disgustos inesperados. Julen Itxaso también estuvo acertado, interviniendo cuando fue necesario. La presión sobre el rival propició recuperaciones de balón, que acabaron en ocasiones de gol. Los de Sergio Francisco no se esmeraron en el juego ofensivo, pero tampoco la situación dejaba margen para asumir riesgos. El míster insistió en probar con dos delanteros. Visto el resultado, no parece el modo de crear mayor peligro. Sergio Francisco intentó refrescar las ideas incorporando a Juan Domínguez y a Balerdi. Y al ver que el partido parecía encaminado a las tablas, decidió salvar el punto reforzando la medular. Confió en Ander Sanchez, y el irundarra respondió en su estreno liguero. La actuación de los canteranos está resultando satisfactoria.

            Siete jornadas sin ganar son una gran losa para el Real Unión. Pero lo verdaderamente preocupante es haber perdido los dos últimos encuentros disputados en el Stadium Gal. Sumar fuera es perfecto cuando el equipo cumple como local, y los txuribeltz no lo han hecho desde mediados de enero. Por eso la racha debe acabar. El sábado llega el Tudelano, equipo que iguala en puntos a los de Sergio Francisco. Será un enfrentamiento directo entre dos equipos con idéntico objetivo, pero distinta trayectoria. Mandiola ha cambiado al Tudelano. Lo ha sacado del descenso y ha logrado excelentes resultados, doblegando al Toledo o al Barakaldo. Manix conoce Gal, conoce al Unión y hará todo lo posible por sumar los tres puntos a orillas del Bidasoa. El equipo que consiga imponerse habrá dado un gran paso hacia la permanencia.

            El Real Unión no puede esperar más. Los tres últimos rivales en el Stadium Gal serán Toledo, Atlétic B y Fuenlabrada. Tres equipos que luchan por estar en el play-off de ascenso. Quedarán cinco partidos a domicilio, de los que la visita al Sariñena parece la única propicia para sumar los tres puntos. Las Palmas, Barakaldo y Amorebieta serán duras salidas para los txuribeltz. Es importante recordar que la última jornada tocará visitar al Puerta Bonita, equipo que marca la zona de descenso. No convendría tener nada en juego en Carabanchel. Es pronto para hacer cuentas, claro. Pero ganar al Tudelano puede resultar vital.