martes, 10 de diciembre de 2013

Lo que el río ve

No es suficiente
UNAI OIARTZUN


Dos partidos consecutivos en el Stadium Gal y tan solo un punto más en el casillero. El Real Unión no ha sacado provecho a la opción de engancharse al grupo cabecero. En consecuencia, se ha estancado en la zona templada. Fuera de peligro por ahora, pero inmerso en una preocupante dinámica en la que los resultados no acompañan. El partido ante el Sariñena parecía un punto de inflexión, pero tres jornadas más tarde, no es más que la única victoria en nueve jornadas. Desde el doce de octubre, el Real Unión ha sumado seis puntos. Solo ha sido capaz de ganar al colista del grupo. Las semanas siguen pasando y los txuribeltz tropezando. No cabe duda de que la temporada es larga y que las rachas cambian. Pero en este caso, el viento no cesa y la tormenta parece no tener fin.
         Por suerte, los números no lo son todo en el fútbol. Las actuaciones contra Bilbao Athletic y Barakaldo hacían pensar en el cambio  que necesitaba el Unión. Pero el domingo, el equipo volvió a mostrarse irregular. Con solidez defensiva por momentos, y con excelentes combinaciones de medio campo para adelante. Con una interesante conexión entre Yeray y Saizar. Pero también con imprecisiones constantes y  errores puntuales que pudieron costar la derrota. El Amorebieta no fue más que el Unión, pero estuvo cerca de sumar los tres puntos. Las intervenciones de Otermin salvaron el partido en más de una ocasión. Pero insisto en que los vizcaínos no tienen más potencial que el equipo de Sergio Francisco. Tampoco muchos de los equipos que le preceden en la tabla. El mismo domingo, poco más hubiera necesitado el Real Unión para haber amarrado una victoria importante.
           La sensación es que un solo gol hubiera bastado. Y las ocasiones llegaron, pero los de Irun siguen negados de cara a portería. Eneko Romo es el único  que ha estado enchufado en las últimas jornadas, por eso nadie entiende el cambio realizado por Sergio Francisco a un cuarto de hora para el final. Es verdad que el rendimiento de ciertos jugadores decrece a partir del ecuador de la segunda parte. Pero en el caso concreto del domingo, con el empate a cero en el marcador y a pocos minutos del final del evite, Romo pudo haber resultado decisivo. Con el terreno de juego en mal estado y ante la imposibilidad de ser precisos por abajo, el Unión no tenía más remedio que buscar el balón largo. Supongo que con esa idea sacó Sergio a Goikoetxea. En ese caso, Eneko Romo hubiera completado una dupla poderosa. No vamos a descubrir el potencial del navarro en el juego aéreo.
           En cualquier caso, el domingo se escucharon más silbidos que ánimos en el Stadium Gal. Algo que es inaceptable. La ausencia del las peñas afectó de manera evidente, pero la exigencia o impaciencia de algunos sectores de la grada terminaron por turbar el ambiente. El público es libre de expresar su opinión, pero no creo que las críticas a voz en grito, ni las pitadas a los jugadores ayuden en el rendimiento del equipo. El Real Unión atraviesa un mal momento, económico y deportivo. Y necesita apoyo social. Aliento y ánimo de su afición. Todos debemos remar en la misma dirección. De lo contrario, la nave se verá abocada al naufragio. Quedan dos partidos para despedir la primera vuelta y el equipo de Sergio Francisco debe luchar por sumar tres o cuatro puntos más. El undécimo puesto no es el lugar que le corresponde. No puede conformarse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario